ORÁN: CRIMEN DEL BAGAYERO

En pocos días se cumplirá un mes del crimen de Fernando Gómez, trabajador fronterizo y bagayero, quien se convirtió en la primera víctima fatal de la gestión Milei-Bullrich en el marco de una persecución a trabajadores durante una protesta. El hecho ocurrió el 18 de diciembre en el Puesto 28 de Julio de Gendarmería, cerca de Orán y Aguas Blancas.

En las últimas horas se conocieron dos denuncias importantes. La primera fue realizada por el hermano de Ariel Gareca, uno de los heridos graves. Daniel Gareca relató: «Los gendarmes lo agarraron y, estando en el suelo, le dispararon. Lo quisieron rematar».

Ariel, de 25 años, tiene una bala alojada en la cabeza. Actualmente está internado y a la espera de que le coloquen una placa de titanio.

La segunda denuncia se centra en las novedades sobre el caso de Fernando Gómez, quien murió tras recibir dos disparos cerca del río. Según los testimonios, los gendarmes intentaron descartar su cuerpo en el agua.

El abogado David Leiva, representante de Gareca, difundió un comunicado de prensa titulado «La causa de los bagayeros-chancheros aún está estancada», el cual fue publicado por la periodista Elena Corvalán. ¿Qué novedades hay?

Gendarmería Nacional entregó una lista con los nombres de los gendarmes que participaron en el operativo represivo la noche del 18 de diciembre. Los efectivos pertenecen a seis destacamentos, no solo de Salta, sino también de Tucumán y Santiago del Estero.

El comandante Rafael Zselect, jefe del Escuadrón 20 Orán, informó que se realizaron 1.800 disparos de cartuchos con munición AT (antitumulto), supuestamente efectuados en “un ángulo de 45° hacia el suelo”. Sin embargo, esta versión es desmentida por los heridos, ya que hay bagayeros con perdigones en el rostro y la cabeza.

Fernando Gómez fue asesinado en un sector conocido como La Playa, una zona de monte. En ese mismo lugar, Fabián Gualpa también resultó herido. Posteriormente, Ariel Gareca fue baleado sobre la ruta 50, durante la protesta. Esto demuestra que se utilizaron balas o perdigones de plomo tanto en el monte (persecución) como en la ruta (protesta).

En el informe del comandante no se menciona ningún testimonio que indique que la patrulla haya recibido disparos. Según David Leiva, «no está planteado un enfrentamiento con armas de fuego entre bagayeros y gendarmes».

Una de las denuncias más alarmantes es la falta de avances en la investigación: no está el informe de la autopsia, no se han secuestrado armas y tampoco se han completado las pericias balísticas. Por lo tanto, no hay imputados. Esto respalda lo señalado por Leiva sobre el estancamiento de la causa.

El abogado insiste en que la fiscalía debe tomar declaraciones testimoniales tanto a los gendarmes que participaron en el operativo como a los bagayeros que presenciaron los hechos. Este paso es crucial para corroborar denuncias como la de varios testigos que aseguran que los gendarmes intentaron desechar el cuerpo de Gómez en el río Pescado.

Contra la impunidad que intentan garantizar el gobierno nacional, el provincial y el Poder Judicial, es fundamental seguir visibilizando el pedido de justicia de los bagayeros, chancheros, sus familias y los abogados que luchan contra estas irregularidades. Justicia para Fernando Gómez, Ariel Gareca y Fabián Gualpa.

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