Por CPN Adriana Farah
Trabajadora Popular
En esta oportunidad, traigo a colación las reflexiones del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, que son pertinentes en este momento que estamos viviendo. En una conferencia de prensa reciente hablaba acerca de la post pandemia dejando sentado que había que atenderla con la visión de una nueva normalidad.
En el mundo somos muchos los que creemos en el advenimiento de nuevas formas de convivencias, distintas de las que hemos vivido, que fueron y que siguen siendo tristes, desgraciadas e indignas para la mayor parte de la humanidad.
Kicillof, lo expresó desde lo pragmático: hay que construir la post pandemia ahora, “no hay que esperar a que llegue porque está a la vuelta de la esquina” y concluía que ( y esto es lo mas importante de sus aseveraciones) es necesario no trabajar sobre una visión imaginada de lo que ella pueda ser, trabajar ahora para corregir los males reales que hoy tenemos.
Tal vez desde esa postura podamos pensar en una nueva normalidad trabajada, conquistada desde la pandemia.
Parecería muy apropiado para sobrellevar la crisis provocada por la gestión de Mauricio Macri y por la pandemia y para augurar un futuro distinto.
Tengamos presente que el presidente Alberto Fernández trabaja por la unidad de los sectores del empresariado y de los trabajadores buscando que no sea más una cuestión antinómica, es decir trabajadores por un lado y empresarios por otro, como si fueran dos sectores que nunca van a poder trabajar en conjunto.
El interés de los empresarios por sus trabajadores se ha visibilizado significativamente en el sector de las PYMES y podemos sostener por lo vivido en estos meses que las pequeñas y medianas empresas son las que pueden levantar el país en el corto o mediano plazo, pero también la economía popular puede hacerlo, la economía de los trabajadores que se las ingenian para crear su propio trabajo.
Al respecto, en este año 2020, 330 cooperativas pudieron constituirse, de los 1237 proyectos de Cooperativas que se han presentado ante INAES para conformarse cumpliendo las normativas. Muchas forman parte de emprendimientos en marcha de la economía popular, emprendimientos personales y familiares.
En Salta tenemos constituidas 77 cooperativas. Han surgido también nuevas actividades en el campo cooperativo como el cuidado de personas mayores o la gestión de residuos y otras que tienen mucho que ver con las necesidades y potencialidades de trabajo de los barrios salteños, entre ellas la construcción de viviendas
Es importante esta actividad porque además de responder a la demanda de vivienda puede generar trabajo poniendo dinero en el bolsillo de quienes la emprendan desde el asociativismo, dinero que además va a motorizar la demanda desde el consumo popular. Los ciudadanos que nos escuchan, de los barrios, es importante que piensen y proyecten y se contacten con todos aquellos que estamos dispuestos a colaborar para llevar adelante estos proyectos barriales.
Dentro de la Economía Popular las mujeres principalmente pueden llevar adelante otras actividades como son las que pueden atender al trabajo textil y alimentario.
Imaginemos lo que se podría hacer, si con el apoyo de especialistas nutricionales, se pudieran crear menús que pudieran incluso llevarse a los merenderos o a los comedores barriales. Cooperativas o unidades productivas podrían fabricar estos menús que aportarían a la soberanía alimentaria creando fuentes laborales.
Me parece que ahí está el secreto para generar la oferta y la demanda en el mercado del trabajo, dinámica que la economía tradicional no puede llevar a cabo aún después de 4 años de destrucción.
El macrismo sostiene que la riqueza la crea el capital porque “primero se acumula y luego se da empleo”. Hay quienes sostenemos que es el trabajo el que crea la riqueza de la que unos pocos se apropian. La pandemia ha demostrado que cuando las fábricas no abren las puertas porque los trabajadores deben quedarse en sus casas, toda la economía se para.
Crear trabajo es la meta de la Economía Popular, pero no desde el individualismo sino como objetivo para el colectivo que es la sociedad.
Tenemos que atender a esa nueva normalidad que queremos construir, especialmente en nuestra Argentina. Yo diría especialmente en nuestra Salta, con miras a una mayor igualdad y mejor vida para todos los trabajadores y para ello la Economía Popular brinda la herramienta adecuada.
