Elizabeth Gómez Alcorta y Alba Rueda se pronunciaron a cerca de la necesidad de incorporar de manera urgente la perspectiva de género en la justicia, después de que se confirmara la pena para el homicida de la dirigente trans Diana Sacayán. Gabriel David Marino finalmente fue penado a prisión perpetua por la muerte de Sacayán, pero la Cámara de Casación Penal le quitó el agravante de «odio a la identidad de género».
El fallo de la Sala I de la Cámara «evidencia la falta de perspectiva de género en la administración de justicia de nuestro país. La necesidad de transformación es urgente», tuiteó Elizabeth Gómez Alcorta, ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad (MGYD).
Alba Rueda, subsecretaria de Políticas de Diversidad del ministerio de MGyD, consideró que el fallo «desde lo humano es un escándalo, es cruel, es negar nuestras identidades travesti trans dentro del ámbito de la justicia».
«La violencia estructural no se basa solo en motivos de género sino en los lugares que ocupamos a partir de nuestras identidades de género. Esto es un travesticidio porque Diana era, es, una compañera travesti referente de los derechos humanos y la interpretación de las normas siempre tienen que tener en cuenta el contexto social», añadió la funcionaria.
Rueda recordó que «en marzo, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) puso en valor el primer fallo que incorpora la variable de identidad de género dentro del ámbito judicial».
«Negar nuestras identidades es invisibilizarnos y es negar los motivos por los que vivimos y nos matan», añadió la subsecretaria.
Y consideró que la resolución de la Cámara «es escandolosa, niega nuestras identidades y estamos dispuestas a avanzar en la exigencia de que el ámbito judicial en nuestro país nos reconozca en nuestros cuerpos, nuestros trayectos de vida, algo de todo eso. Este fallo constituye un ejemplo más de la necesidad de incorporar en el Poder Judicial la perspectiva de género».