El presidente asumió formalmente el cargo de presidente del Partido Justicialista y criticó duramente al Macrismo. “Escriben libros donde no son capaces de asumir ni cercanamente el desastre que han hecho”, señaló el mandatario.
El acto se desarrolló el lunes por la noche en el club Defensores de Belgrano. Alberto Fernández aseguró que «la discusión sigue siendo desarrollo o especulación financiera», al asumir la presidencia del Consejo del Partido Justicialista (PJ), oportunidad en la que también criticó a la alianza opositora Juntos por el Cambio porque, dijo, «escriben libros donde no son capaces de admitir el desastre cometido», en referencia al exmandatario Mauricio Macri. Señaló además que «los que ganaron la elección de 2015 eran cultores de la idea de que, en la división internacional del trabajo, nuestro rol era alimentar al mundo», el presidente afirmó que la gestión macrista provocó que «de nuevo el desarrollo industrial quedara postergado con la caída de 23.000 pymes».
Fernández contó que, después de las elecciones de 2019, el peronismo heredó «una Argentina muy dañada, en terapia intensiva, que se contagió de Covid», y celebró la conformación del Frente de Todos: «Ante tanta desgracia era necesario estar unidos y cerca, y la unidad debe ponernos felices».
«En la unidad logramos el triunfo, fuimos capaces de enfrentar una tremenda pandemia, recuperar economía y trabajo, cuidando la salud de nuestra gente, vacunando a todos los argentinos y argentinas», remarcó el primer mandatario.
Fernández indicó que «otros se levantan de la cama, hacen Zoom y critican», en referencia al encuentro partidario que encabezó Macri, con dirigentes de Juntos por el Cambio, con cara de dormido y desde la cama, junto a Juliana Awada aún en pijamas.
Fernández señaló también que «escriben libros donde no son capaces de admitir ni cercanamente el desastre que han hecho».
«Nuestro proyecto es integrador, federal, sin desigualdades, de inclusión y trabajo, que no quiere favorecer la especulación financiera», remarcó Fernández, y resaltó que el objetivo es «volver a poner en el escenario social» a quien «quedó sumergido en la pobreza o quedó sin trabajo o al empresario que da empleo».
«Llegamos al mundo de la política para representar a los que no tenían voz, los desposeídos, a los cabecitas negras y descamisados, fuimos el hecho maldito del país burgués pero también el que más alegría le trajo a la inmensa mayoría de argentinos que trabajan», completó el mandatario.
