La diputada nacional, Alcira Figueroa, expuso el fracaso en la provincia en cuanto a la prevención de la violencia contra las mujeres y femicidios. “Necesitamos un cambio de sistema y un cambio en la Justicia”, expresó.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, la legisladora se refirió a la situación de extrema vulnerabilidad institucional a la que están expuestas las víctimas de violencia de género en la provincia de Salta. Remarcó que es necesario un cambio en el poder judicial para evitar el aumento de casos de femicidios.
“La primera violencia es la desigualdad que tenemos en Salta. Las grandes mayorías que vemos son las que tienen el salario mínimo. La Justicia recibe las causas, pero no las asigna, no dictamina, no ejerce. No tenemos justicia en Salta, no está funcionando”, expresó.
En este sentido, la legisladora añadió “Muchas de las mujeres que han hecho denuncias, han ido y vuelto miles de veces hacia las Comisarías, no han tenido respuestas y han llegado a la situación límite de la muerte. Hay muchas formas de violencia además de la violencia física, la violencia simbólica, la violencia doméstica. Esta provincia que hoy es una fábrica de generar pobres y excluidos, alimenta la violencia que tenemos en los hogares más humildes. Necesitamos un cambio de sistema y un cambio en la Justicia”, sostuvo Figueroa.
El último caso de femicidio en la provincia, se registró el día de ayer en la capital salteña, con la lamentable aparición sin vida de la joven Macarena Blanco, de 28 años, desaparecida el 5 de marzo pasado. Fue hallada muerta ayer domingo, en horas del medio día, en un departamento céntrico. Hasta el momento tres hombres fueron detenidos y serán imputados en las próximas horas.
