A menos de un mes del cierre de listas, ambos rechazan las PASO y quieren una fórmula de consenso competitiva para el Frente de Todos. El eje energético, clave para el crecimiento y acumulación de dólares.
Sergio Massa y Máximo Kirchner avanzan en el diseño de la estrategia electoral del Frente de Todos y pretenden una fórmula de consenso pese al reclamo de ir a internas del sector referenciado en Alberto Fernández. Este domingo partieron rumbo a China para consolidar su sociedad política y delinear los principales nombres que encabezarán las listas, a cuatro semanas del cierre. La agenda de trabajo, con fuerte eje energético, buscará promover inversiones y ampliar el swap para robustecer de dólares el Banco Central. Los resultados de esta misión tendrán impacto en la coalición oficialista de cara a las elecciones 2023.
Massa y Kirchner se conocen desde el primer gobierno kirchnerista, pero fue desde la oposición al gobierno de Mauricio Macri que nació una sociedad política que llevó a la conformación del Frente de Todos, la victoria en el 2019 y ahora los tiene como impulsores de una lista única pese a la resistencia de dirigentes del espacio. En el avión en el que viajaron a China, hubo una importante comitiva con aire presidencialista y en la que se destaca el vicejefe de Gabinete y armador político, Juan Manuel Olmos. También estuvieron dos dirigentes leales de los líderes del Frente Renovador y La Cámpora: la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, y la diputada Paula Penacca.
“Son compañeros y amigos, además del vínculo político tienen un vínculo humano”, describieron desde la mesa política del massismo sobre la relación entre los dos dirigentes a quienes los califican como «animales políticos». Si bien tienen perfiles distintos, se complementan y supieron trabajar en conjunto en la primera parte de esta gestión cuando en el Congreso eran presidente de la Cámara uno y titular del bloque el otro. La diferencia más importante que tuvieron fue en la votación del acuerdo de facilidades extendidas con el FMI, cuando el espacio de Massa votó a favor mientras que el de Kirchner (renunció a la presidencia del bloque en la previa) estuvo en contra. Ambos, luego, compartieron críticas a ese entendimiento alcanzado durante la gestión de Martín Guzmán. “Llevó para adelante los problemas y vendió algo con el FMI que no había”, reprocharon cerca del tigrense.
De ambos lados destacaron que el vínculo que ambos construyeron en el Congreso cuando todavía no había un acuerdo electoral y gobernaba Cambiemos sirvió para “poner un límite” a Macri. El punto de inicio fue el proyecto de Ganancias que Massa impulsó y la oposición unida en ese entonces aprobó en Diputados. “Este viaje es la consolidación de una muy buena relación de confianza política”, destacaron sobre los dos dirigentes que fueron parte importante en la construcción del Frente de Todos.
Tanto Massa como Kirchner plantean que en estas elecciones es necesaria una fórmula competitiva y evitar las internas. “No nos entra un quilombo más”, reclamó Massa semanas atrás. En sus últimos discursos hicieron hincapié en la “responsabilidad” de la gestión y en lo que queda hasta cerrar el mandato.
Hasta acá hay dos anotados para ir por la Presidencia dentro del Frente de Todos: Daniel Scioli y Juan Grabois. Este lunes se suma Agustín Rossi a la lista. Mientras tanto, Wado de Pedro sugirió una vez más una candidatura con un spot lanzado tras el acto del 25 de mayo por los 20 años de la asunción de Néstor Kirchner. Ese día Cristina Kirchner puso en el escenario al ministro del Interior al lado de Massa, y el sábado los dos volvieron a mostrar juntos en Mercedes.
También estaba Axel Kicillof. Los tres nombres son los que suenan para ocupar los principales lugares de las listas. Según supo uno de los dirigentes al tanto de las negociaciones en el frente, «ninguno tiene un lugar asegurado», «están todos en el bolillero».
Massa y Kirchner creen que las PASO ponen en una situación de debilidad al Frente de Todos y aseguran que es una “irresponsabilidad” aplicar en este momento esa herramienta. Especialmente cuando la propia vicepresidenta habla de un escenario electoral de tres tercios. La coalición oficialista podría quedar tercera. Los cálculos que hacen es que con candidato único obtienen 30 puntos de piso y quedan más competitivos de cara a la general. “Orden político para que haya orden económico”, pide Massa.
La sintonía llega también a la intención de discutir un programa de Gobierno. Como Cristina Kirchner, Massa también propone un gran acuerdo de la dirigencia política en torno a cómo afrontar la deuda externa y la dolarización de la economía. El desafío que ambos plantean es que el crecimiento de la economía se redistribuya y se recupere el poder adquisitivo de los trabajadores. Máximo Kirchner pidió una suma fija, más allá de la paritaria. El ministro no se expresó al respecto.
Los dos también están muy vinculados a la provincia de Buenos Aires. La provincia que aglutina el 37% del padrón electoral es la principal obsesión del Gobierno porque pretende retenerla y el resultado que allí obtenga será vital para lo nacional. Kirchner es el presidente del PJ bonaerense y el partido de Massa (Frente Renovador) tiene su mayor despliegue territorial allí. Una de las definiciones que se espera es si Axel Kicillof desdoblará o no las generales. En el massismo creen que desdoblar no es conveniente si Javier Milei no lleva candidato a gobernador, lo que puede aumentar el caudal de votos de Juntos por el Cambio. Los dos lo analizarán en el viaje.
Pero el viaje no solo será para avanzar con definiciones electorales. Las reuniones de trabajo en Shanghai y Beijing tendrán como ejes proyectos de inversión en áreas estratégicas, además de la renovación y ampliación del uso del swap (intercambio de monedas) que permitirá aumentar los dólares en el Banco Central. También será importante la reunión que mantendrá con la presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD) del BRICS, Dilma Rousseff. Con el apoyo del presidente de Brasil, Lula da Silva, Argentina espera que la institución financiera modifique un artículo de su estatuto para que el país vecino pueda prefinanciar las exportaciones. Este mecanismo le permitirá al Banco Central preservas los dólares que se destinan a esas importaciones.
La comitiva del equipo económico que encabeza Massa pretende robustecer la matriz energética de la Argentina e incrementar obras como la del gasoducto Néstor Kirchner que le permitirá al país exportar energía. “Tenemos la oportunidad de que la energía sea un segundo campo”, le gusta repetir a Massa. Entre los funcionarios que viajan están la secretaria de Energía, Flavia Royon; y el presidente de ENARSA, Agustín Gerez.
El martes y el miércoles Massa y equipo tendrán reuniones con autoridades de distintas empresas para abordar el proyecto de la ejecución de las represas Nestor Kirchner y Jorge Cepernic, en Santa Cruz, pero también otras en las que se pretenderá conseguir inversiones para la generación y transmisión de energía como también el desarrollo de la minería y extracción del litio. “Planteamos que nuestra propuesta es con crecimiento y cadena de valor sumado a la radicación en el lugar”, explicaron en Economía sobre la carta de presentación de las iniciativas que impulsan. “El Gasoducto Néstor Kirchner y la reversión del Gasoducto del Norte son ejemplos de que se puede salir creciendo económicamente y no con ajuste, recesión y desempleo”, graficaron desde el massismo para contraponer con el modelo de Juntos por el Cambio.
Esta agenda de cinco días de trabajo se da en paralelo a la renegociación del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y mientras Argentina afronta las consecuencias de una sequía histórica y que obliga a reformular las cuentas en el Palacio de Hacienda. Este 2023 Massa calcula que el país se perderá de recaudar 17 mil millones de dólares. En el acto en Plaza de Mayo, Cristina Kirchner reclamó un nuevo entendimiento que permita el crecimiento y que el pago de la deuda esté atado a las exportaciones. De ahí que es clave el éxito con China, el segundo socio comercial de Argentina, en la previa de cerrar el acuerdo. “Los muertos no pagan”, retoma Massa constantemente al citar a Néstor Kirchner.
En la entrevista que dio a C5N, la primera después de seis años a un canal de televisión, Cristina Kirchner recordó la frase de un ex gobernador que decía que “en política los agravios prescriben a los seis meses”. Sergio Massa y Máximo Kirchner olvidaron cánticos y frases cuando eran contrincantes y ahora, en unidad, buscan el nombre del candidato o candidata y darle forma a un Frente de Todos que se mantiene competitivo y quiere ir por cuatro años más de gestión.
Fuente: Destape web, por Lucas Bo.