La obra que comenzó con una inversión inicial de $131 millones de pesos, cifra que hasta el momento su duplicó, comenzó los primeros días de abril y hasta ahora continúa en desarrollo.
El concejal Gauffín, quien fuera uno de los concejales más críticos con la obra pidió un informe al Municipio
«se trata de una obra sencilla, por lo que no necesita tanto presupuesto», y que además «se debería haber contratado otra empresa, con más compromiso» debido a que la obra «fue hecha a las apuradas y con baja calidad», remarcó el edil.
Gauffin señaló que «la Plaza 9 de Julio es una muestra clara de cómo se gestionó la obra pública en la ciudad. Cuesta ver que haya $250 millones invertidos y al vecino también le cuesta ver eso».
En tanto que la concejala Paula Benavides, aseguró que la obra en la plaza central de la ciudad terminó costando más cara que la construcción del nuevo puente de zona sur, con un valor aproximado de 150 millones de pesos, de los cuales la Municipalidad aportó las dos terceras partes y el resto fue enviado por Nación.
Benavides agregó que no se observan grandes modificaciones significativas en la plaza central y que no entiende cómo se pudo haber gastado tanto dinero en ella.
