La privatización del Banco de Préstamos y Asistencia Social dejó un vacío en el control de los juegos de azar, facilitando la proliferación de actividades ilegales que ahora involucran a menores gracias a la tecnología.
La problemática de los juegos de azar clandestinos ha resurgido con fuerza en Salta, adaptándose a los tiempos modernos mediante el uso de las redes sociales y facilitando el acceso a menores de edad. Esta situación alarmante tiene sus raíces en la privatización del Banco de Préstamos y Asistencia Social, lo que resultó en la derogación de la ley que regulaba estos juegos y dejó a la provincia sin su principal órgano de control.
Aunque el control parcial fue transferido al Ente Regulador del Juego de Azar (ENREJA), este organismo no ha logrado llenar el vacío debido a la falta de experiencia de sus funcionarios en la temática de los juegos de azar y su control. Esto ha llevado a un incremento significativo en las actividades clandestinas, que ahora se organizan y promocionan a través de plataformas digitales, exponiendo a una audiencia más joven y vulnerable.
Voces de la Comunidad y la Inacción Gubernamental
Diferentes actores sociales han alzado la voz sobre esta problemática. Entre ellos, una diputada liberal sugiere que una nueva ley o una serie de denuncias podrían resolver el problema. Sin embargo, la situación económica del país, caracterizada por una recesión, alto desempleo e inflación, tiende a exacerbar el problema en lugar de mitigarlo.
El Profesor Ernesto Gómez, experto en la materia, afirma que para combatir eficazmente los juegos clandestinos, tanto virtuales como presenciales, es necesario implementar un conjunto de medidas integrales que aborden aspectos tecnológicos, económicos, sociales y educativos. Gómez critica la perspectiva simplista de solucionar el problema desde una única perspectiva, destacando que el mercado libre, según la teoría de la mano invisible de Adam Smith, no es aplicable en este contexto.
La Necesidad de Políticas Integrales
Desde el Gobierno Provincial, se enfrenta el reto de diseñar e implementar políticas integrales que combatan los juegos clandestinos de manera efectiva. Esto incluye la necesidad de fortalecer las capacidades tecnológicas de monitoreo y control, promover campañas educativas para concienciar a la población sobre los riesgos, y crear programas económicos que ofrezcan alternativas viables a quienes recurren a estas actividades por necesidad.
Reflotar el control estatal y corregir los errores cometidos al desmantelar el Banco de Préstamos no será una tarea sencilla. Requiere un esfuerzo coordinado y multifacético que vaya más allá de las soluciones superficiales propuestas por algunos legisladores.
Fuente: Prof. Ernesto Gómez.
