«Milei: Siempre con palabras históricas»

Cada vez que el presidente Javier Milei habla, ya sea dentro o fuera del país, proclama que sus actos y sus palabras son históricos, sin precedentes en el género humano. Durante la presentación del presupuesto 2025 ante los legisladores nacionales, la convocatoria presidencial logró reunir a 130 diputados y senadores, mucho menos que los 327 miembros que integran ambas cámaras. Además, la transmisión alcanzó uno de los ratings más bajos para un domingo en horario central.

A pesar de su retórica incendiaria, no está claro si Milei comprende que los insultos pueden generar adhesiones momentáneas en algunos sectores, pero difícilmente conseguirán la complacencia de sus destinatarios a largo plazo.

Un presidente «a cajoncito»

Milei parece aferrarse a la tradición histórica argentina, citando en sus discursos memorables referencias, como la que pronunció el presidente Nicolás Avellaneda al inaugurar las sesiones ordinarias del Congreso en 1876. En esa ocasión, Avellaneda afirmó que «dos millones de argentinos economizarían hasta sobre su hambre y sobre su sed para responder en una situación suprema a los compromisos de nuestra fe pública en los mercados extranjeros». Esta defensa de honrar la deuda pública resuena hoy en la narrativa de Milei, en medio de la creciente deuda con organismos internacionales.

La gran deudora del sur

La situación de la deuda externa argentina ha sido un tema recurrente en la historia del país. En 1886, el periódico El Censor, dirigido por Sarmiento, ya afirmaba con ironía: «Silencio que al mundo asoma la gran deudora del sur». Hoy, en pleno siglo XXI, Argentina sigue siendo vista como una gran deudora, no solo del sur, sino del mundo entero, especialmente en su relación con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

El gobierno ha sorprendido a propios y ajenos con gestos polémicos, como la reciente invitación de Milei a un asado en Olivos para 87 diputados de distintos bloques. Aunque se negó que fuera una celebración, alegando que cada uno pagó su plato, muchos lo vieron como una burla, sobre todo en un contexto de tensiones económicas.

El presupuesto y la economía congelada

El gobierno de Milei ha mostrado poco respeto hacia las leyes, y el presupuesto no es la excepción. Las estimaciones oficiales sobre crecimiento económico, inflación y cotización del dólar difieren considerablemente de las del mercado. Proyecciones como un crecimiento del 5% del PIB, una inflación anual del 18,3% y un dólar a 1.200 pesos han sido recibidas con escepticismo por los consultores económicos.

Una incógnita es el superávit comercial estimado en 22.000 millones de dólares, particularmente en el sector energético. La incertidumbre crece tras la retracción de Petronas, que puso en duda una inversión clave para licuar gas natural y exportarlo desde Argentina, luego de un conflicto entre Río Negro y Buenos Aires.

Pulseada con los sindicatos y Aerolíneas Argentinas

A pesar de haber negociado con el Congreso la eliminación en la Ley de Bases de la privatización de Aerolíneas Argentinas, el presidente Milei sigue insistiendo en avanzar con la medida. Esta postura ha generado un enfrentamiento con los sindicatos que reclaman una recomposición salarial y se oponen a cualquier intento de privatización. Mientras tanto, el Consejo de Mayo, anunciado hace seis meses, aún no ha designado a sus miembros ni ha convocado a las organizaciones que deberían integrarlo.

También te puede interesar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *